domingo, 5 de marzo de 2017

Bienvenidos a Aluion Capítulo II

*Narra Sitka*
Creo que he llegado a tiempo, solo veo a tres personas. Me acerco a Dan y le pongo la mano en el hombro.

-¡Cuánto tiempo! -dije sonriendo-

-¡Eh! Sitka, llegas tarde -dijo Yui, ahora me fijaba en que se había teñido el pelo y Yukari también-.

-Solo dos minutos, eso es llegar a tiempo.

-No, -Yukari miró subir reloj y me contradijo- llegas 17 minutos tarde exactamente.

-¡Pero qué dices! Mira bien el reloj -señalé el de la estación- ¡Son y tres ahora mismo!

-Oye Yukari... ¿No cambiamos la hora de todos los relojes para llegar a tiempo?

-¡Es verdad! Como lo cambiamos nada más nos llegó la invitación, se me había olvidado por completo -rió nerviosa-.

-Estás en tu mundo como siempre. Faltan por venir Nora, Vee y Manu, ¿no? -siempre llegaban tarde, bueno, cuenta la leyenda que un día Nora y Vee llegaron las primeras-.

-Bueno, Nora y Vee estaban en Madrid viviendo así que... Creo que es normal -dijo Yui mientras intentaba robarle el móvil a Dan para enviarle alguna burrada a su supuesta novia australiana- Pero Manu no tiene porqué venir, ¿no? Después de todo vamos a ir a su mansión.

-A mi me puso en un mensaje que venía porque se aburría de estar todo el rato allí esperando -dijo Dan que había conseguido ahuyentar a Yui-.

-Entonces solo nos queda esperar.

No nos había dado tiempo ni a empezar una conversación y se divisaron dos siluetas. Eran Nora y Vee sin duda. Vee estaba zampándose un kit-kat mientras Nora sonreía caminando a su lado. Alzaron sus manos nada más nos vieron.

-Nuevo récord, solo 6 minutos tarde -dijo Yui con tono orgulloso-.

-Creía que no llegábamos -dijo Vee terminándose el poco chocolate que quedaba- Nora no era capaz de cerrar la maleta y casi perdemos el tren.

-Anda que... Al menos no habéis llegado las últimas.

-¿En serio? Choca esa, Nora -chocaron dos veces, la primera salió rana-. Queda Manu, ¿verdad?

-Tiene que estar al caer, a no ser que venga andando como hace unos años -dijo risueña Nora-.
Como si se tratase de una invocación se escuchó el ruido de un helicóptero, este no se oía lejos, sonaba como si lo estuviera aterrizando en el aparcamiento.

"A ver chicos, -esa voz, es imposible confundirla- salid de ahí. Ah, y antes de crear confusión, Dan, Sitka, Nora, Vee, Yui y Yukari me refiero a vosotros".

-¿Nos acaba de hablar por un megáfono? -dije incrédulo-.

-Qué vergüenza... ¿era necesario el numerito? -dijo Yukari tapándose la cara-.

Salimos y Manu nos recibió sonriendo, como un niño al que le acaban de dar un juguete nuevo por Navidad.

-Siento llegar tarde, es que cuesta bastante aterrizar uno de estos por aquí -dijo rascándose la nuca-. Subid, que os llevo.

-¿Y las maletas?

-Se las llevan en coche -unos señores con pinta de mayordomos, cogieron nuestras cosas y se las llevaron-.


*Narra Manu*
Subimos al helicóptero, el viaje no sería muy largo. Lo tenía todo planeado y por ahora todo iba a la perfección salvo por la hora ¡Maldita sea! Debería haber más helipuertos en esta ciudad.
Tras una hora de viaje hablando un poco de cómo nos había ido la vida en estos 4 años llegamos a la mansión.
Todos miraban a su alrededor, helicópteros, aviones privados, ferraris... Parecía que se les iba a caer la boca al suelo.

-Llamaré a la limusina, tiene que estar al caer pero mejor asegurarse -cogí el móvil y llamé al chófer, en dos minutos estaría aquí-.

-Manu si sigues explotando al personal se van a rebelar -dijo Yui-.

-No los estoy explotando, es su trabajo -respondí tranquilo, Yui se me quedó mirando desafiante-.

El chófer llegó con la limusina, nos montamos y en una media hora estábamos en la puerta de la mansión. Tardamos un poco más porque se quisieron parar en los jardines. Hicimos fotos y tiramos a Sitka a un matorral y no conseguimos sacarlo así que sigue ahí solo. Es broma. Está aquí con nosotros, maldiciéndonos porque el matorral tenía alguna que otra espina. 
Abrí la puerta de la mansión.

-Bueno, os cuento, las habitaciones están en el segundo piso, en el ala oeste las chicas y los chicos. El comedor está en la planta baja junto al salón. En el primer piso están los cuartos de juegos, la biblioteca y la sala de ordenadores. En el sótano... Bueno, esta noche hablamos de lo que queda por decir -sonreí-.

-Manu, pareces una azafata -dijo Yui-.

-Vuestras cosas están en vuestras habitaciones. Ah, y se me olvidaba, tenéis cada uno un cuarto de baño personal.

-Entonces, nos queda investigar un poco, ¿no? -dijo Dan-.

-Por ahora, subamos a las habitaciones. Yo quiero verlas ya -dijo Nora sonriendo-.

Subimos al segundo piso y llevé a cada uno a su habitación. Las que más gritaron fueron Nora y Vee al verlo. Me había encargado de hacerlo en base a los gustos de cada uno. Pero todos hacían la misma pregunta "¿Por qué tenemos esta ropa sobre la cama?". A lo que yo respondía sonriendo "Esta noche, poneos esto para cenar".

El resto del día pasó rápido, la cosa cambió cuando llegó la hora de cenar y yo abriría la puerta...

CONTINUARÁ...


No hay comentarios:

Publicar un comentario